Parque Nacional El Ávila
El Ávila, también conocido como el pulmón vegetal de Caracas, es nombrado Parque Nacional, para su protección, el 12 de diciembre de 1958, según decreto Nro. 473. Éste se encuentra ubicado en el área centro-norte del país, dentro del tramo central de la Cordillera de la Costa, en el Ramal o Cadena del Litoral. Se extiende a lo largo del Distrito Federal y en la región noroeste del Estado Miranda. Ocupa una superficie de 85.192 Ha. En la foto, vistas que se pueden apreciar desde puntos turísticos en el Parque Nacional El Ávila.
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A pesar de estar sometido a estrictas regulaciones, para su protección y conservación, cada año es atacado por voraces incendios que pueden llegar a destruir una importante parte de su fauna y vegetación. Las razones son múltiples, pero en su mayoría, los incendios son causados por la negligencia de los campistas y visitantes que, violando las normas establecidas, encienden fogatas. El problema es grave si la persona no está familiarizada con el proceso de construcción de una fogata, pero más aún si se hacen en verano, ya que en esta época una lata de aluminio en el suelo o un simple pedazo de vidrio pueden ocasionar un incendio.
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Una vez iniciado un incendio su propagación es inmediata y, si las corrientes de aire son muy fuertes, puede abarcar kilómetros en tan sólo segundos. Aunado a esto la extensión del Parque Nacional El Ávila hace imposible que los guardaparques identifiquen la ocurrencia de un incendio inmediatamente, es por esto por lo que se han activado diferentes vías de colaboración ciudadana.
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A pesar de estar sometido a estrictas regulaciones, para su protección y conservación, cada año es atacado por voraces incendios que pueden llegar a destruir una importante parte de su fauna y vegetación. Las razones son múltiples, pero en su mayoría, los incendios son causados por la negligencia de los campistas y visitantes que, violando las normas establecidas, encienden fogatas. El problema es grave si la persona no está familiarizada con el proceso de construcción de una fogata, pero más aún si se hacen en verano, ya que en esta época una lata de aluminio en el suelo o un simple pedazo de vidrio pueden ocasionar un incendio.
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Una vez iniciado un incendio su propagación es inmediata y, si las corrientes de aire son muy fuertes, puede abarcar kilómetros en tan sólo segundos. Aunado a esto la extensión del Parque Nacional El Ávila hace imposible que los guardaparques identifiquen la ocurrencia de un incendio inmediatamente, es por esto por lo que se han activado diferentes vías de colaboración ciudadana.
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Apoyo civil
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Los civiles cuentan ahora con vías para colaborar con la protección del cerro, a través de los teléfonos 800-avila y 800-vivir o la página del Instituto Autónomo de Protección Civil y Ambiente.
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Actualmente se está organizando una campaña de “toma de conciencia” , lo que permite a los ciudadanos recordar que este "pulmón natural", regula la cantidad de CO2 que se libera al aire diariamente. Recordando por encima de todo que el objetivo del cuidado de este Parque Nacional es su perduración para el disfrute de todos sus visitantes.
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Actualmente se está organizando una campaña de “toma de conciencia” , lo que permite a los ciudadanos recordar que este "pulmón natural", regula la cantidad de CO2 que se libera al aire diariamente. Recordando por encima de todo que el objetivo del cuidado de este Parque Nacional es su perduración para el disfrute de todos sus visitantes.
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